Por Pedro J. Rivera Guzmán
Economista
Pub licado originalmente el 23 de febrero de 2021 en Endi.com
El Virus de la Desigualdad es el título de un informe publicado por Oxfam en enero del 2021. Oxfam es una confederación internacional de 20 organizaciones que operan en 67 países, cuya sede está en Gran Bretaña. Según su propia descripción es “parte de un movimiento global a favor del cambio para construir un futuro libre de la injusticia que supone la pobreza.” Este informe expone como la crisis de la pandemia del coronavirus “ha puesto al descubierto y ha exacerbado las desigualdades económicas, de género y raciales. A la vez que se ha alimentado de ellas”.
Cito los siguientes datos del informe:
- En tan solo NUEVE MESES las mil mayores fortunas del mundo han recuperado su nivel de riqueza previo a la pandemia, mientras que para las personas en mayor situación de pobreza esta recuperación podría tardar MÁS DE UNA DÉCADA en llegar.
- EL INCREMENTO de la fortuna de los 10 milmillonarios más ricos del mundo desde el inicio de la crisis BASTARÍA para evitar que nadie cayese en la pobreza a causa de la pandemia y para financiar una vacuna universal contra la COVID-19.
- En los Estados Unidos, si la tasa de mortalidad de la población latina y negra hubiese sido la misma que la de la POBLACIÓN BLANCA, APROXIMADAMENTE 22 000 PERSONAS NEGRAS Y LATINAS habrían seguido con vida en diciembre de 2020.
- 112 MILLONES DE MUJERES dejarían de tener un riesgo elevado de perder sus ingresos y empleos si la presencia de hombres y mujeres en los sectores económicos más afectados por la pandemia fuese equitativa.
- La crisis de la COVID-19 se ha propagado por un mundo que ya era extremadamente desigual. Un mundo en el que
- una pequeña élite de tan solo 2000 milmillonarios poseía más riqueza de la que podrían gastar aunque vivieran mil vidas,
- durante 40 años, el 1 % más rico de la población ha duplicado los ingresos de la mitad más pobre de la población mundial,
- en el último cuarto de siglo, el 1 % más rico de la población ha generado el doble de emisiones de carbono que el 50 % más pobre, agravando la destrucción provocada por el cambio climático,
- la creciente brecha entre ricos y pobres tiene su origen, pero también ha agravado, las viejas desigualdades por razones de género y origen racial.
6. A escala mundial, la fortuna de los milmillonarios aumentó en 3,94 billones de dólares entre el 18 de marzo y el 31 de diciembre de 2020.28 Su riqueza conjunta asciende ahora a 11,95 billones de dólares, lo que equivale a la suma que los Gobiernos del G20 han movilizado para responder a la pandemia. Los 10 milmillonarios más ricos del mundo han visto crecer su fortuna en 540 000 millones de dólares durante este período.
7. En septiembre de 2020, Jeff Bezos podría haber pagado a cada uno de sus 876 000 empleados y empleadas de Amazon una bonificación de $105.000 y seguir siendo igual de rico que antes de la pandemia.
8. El incremento de la fortuna de los 10 milmillonarios más ricos del mundo desde el inicio de la crisis, bastaría para evitar que nadie cayese en la pobreza a causa de la pandemia y para financiar una vacuna universal contra la COVID-19.
En conclusión, la desmedida desigualdad ya existente en el sistema capitalista mundial ha crecido durante la pandemia. Este crecimiento en la desigualdad ha ocurrido en casi todos los países. Esto incluye a Puerto Rico. De acuerdo a los datos que aparecen en el Informe de Desarrollo Humano de Puerto Rico, en el 2013 la archipiélago estaba entre los cinco países con mayor desigualdad en el mundo. El virus de la desigualdad ya existente antes de la pandemia ha mutado para convertirse en uno más pernicioso. La minoría milmillonaria del mundo, la alta burguesía transnacional, no solo ha sobrevivido la pandemia, sino que se ha beneficiado de ella. Mientras tanto, se perjudican los trabajadores y las trabajadoras. El capitalismo ha mostrado su rostro.
Termino con unas palabras del Secretario General de la ONU citadas en el informe.
“Se ha comparado al COVID-19 con una radiografía que ha revelado fracturas en el frágil esqueleto de las sociedades que hemos construido y que por doquier está sacando a la luz falacias y falsedades: la mentira de que los mercados libres pueden proporcionar asistencia sanitaria para todos; la ficción de que el trabajo de cuidados no remunerado no es trabajo; el engaño de que vivimos en un mundo post-racista; el mito de que todos estamos en el mismo barco. Pues si bien todos flotamos en el mismo mar, está claro que algunos navegan en súper-yates mientras otros se aferran a desechosflotantes”. – António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas